Desde la última vez que os hablamos de Albert Nobbs (y de la necesidad de dar a Glenn Close un Oscar), muchas cosas han cambiado en su pre-producción, después de que el rodaje de la película dirigida por Rodrigo García se retrasase desde verano hasta navidad. La protagonista de la televisiva Daños y Perjuicios sigue completamente envuelta como protagonista, productora ejecutiva e incluso co-guionista de la adaptación, sin embargo nombres como los de Orlando Bloom y Amanda Seyfried han ido cayendo por compromisos de calendario, dejando a otros más brillantes entrar.Ahora Close estará rodeada por Jonathan Rhys Meyers, Mia Wasikowska y Aaron Johnson en este drama, adaptación de la obra de teatro de 1982 en la que participó Glenn Close y que a su vez era la traslación de un relato corto del irlandés George Moore, alrededor de una mujer en la Irlanda del siglo XIX que se viste como un hombre para poder sobrevivir. Un mundo de nobles y servicio que conocemos por obras magistrales como Arriba y Abajo o Gosford Park, y que ha sido la pasión de la actriz desde que interpretara su papel principal hace un par de décadas en las tablas. Ahora, con algunos años más, vuelve al rol para rodearse de lo mejorcito de la juventud cinematográfica, al tiempo que se reúne con un director que la ha guiado varias veces.
Este adicto a los diálogos y a los personajes femeninos se reúne además con una Mia Wasikowska a la que descubrió al mundo gracias a su colaboración en la casi insuperable serie En Terapia. Capaz de hacerse con grandes producciones gracias al super-exito de Alicia en el País de las Maravillas, la australiana está decidiendo con sumo cuidado sus pasos, encaminándose siempre hacia proyectos interesante. Algo parecido le ocurre a Johnson, quien, tras darse a conocer en Kick-Ass, se decanta más por el prestigio y los trabajos independientes. Dos a los que seguir muy de cerca.
Otro de los nombres envueltos hace meses era el de Michael Gambon, aunque a estas alturas no sabemos donde habrá quedado.
