
Ocurre que generalmente este fenómeno se apoya en el gen geek que despierta en el público la compulsión del disfraz y la personificación.
Pues bien, para este verano, la película que ha generado grandes cantidades de expectativa acumulada entre el fandom y explotado la preventa no es otra que “Sex and the City 2”.
Según Hollywood Reporter, los tickets de la película dirigida por Michael Patrick King se venden como pan caliente — o alguna figura similar que gusten—. Harry Medved, vocero de Fandango, comenta:
Cuando salieron los tickets de la película, éstos representaron el 20% de las ventas diarias, sobrepasando a “Kick-Ass”, que representó el 17%. Y los números continúan creciendo, con muchas mujeres que compran tickets para venir en grupo.
El Jefe de Marketing de Regal, Dick Westerling, también habló del tema, refiriéndose a la categoría de evento que adquiere la proyección del film y que excede la pantalla en fanatismo mimético:
Aparte de comprar tickets para poder ver la película, estas mujeres ya están alquilando limusinas y haciendo reservas en restaurantes.
Algunos se manifiestan sorprendidos por el fenómeno. Pero yo me pregunto: ¿no es una reacción análoga al fan de “Star Wars”? Porque veamos, las mujeres quieren ser personajes de esta serie que por segunda vez se convierte en película. Así, van en grupo y se visten para la ocasión. Cada una con su personaje preferido, cuando la pantalla es el espejo de un deseo o fruición. ¿Qué diferencia estructural podemos extraer entonces de un fanático y de otro?
“Sex and the City 2” se estrena en cines el 27 de mayo de 2010.